El pasado viernes 24 de Marzo se nos fue Miguel con sólo 14 años después de luchar como un jabato durante año y medio contra un sarcoma.
Miguel fue un excelente hijo, un estupendo estudiante y un gran deportista. Su pasión era el futbol.
A mediados de Septiembre de 2015 en un partido sintió unas molestias en una rodilla. El fisio de su equipo (el Rayo Vallecano) ya detectó que no era un tema menor y le derivaron al Hospital Niño Jesús.
En apenas una semana los peores presagios se confirmaron. Miguel padecía un sarcoma en su rodilla derecha y aparentemente había ya metástasis. Desde el primer momento el pronóstico fue muy pesimista. Sus padres, tremendos luchadores durante todo el proceso, junto con los médicos del Rayo y el apoyo de nuestra Fundación buscaron alternativas llegando hasta el doctor Eduardo Ortiz, cirujano de la Paz.
Comenzaron las terapias antes de la operación, casi seis meses de quimioterapia en el hospital Niño Jesús, que solidificaron y redujeron el tumor hasta límites operables. Había esperanza.
Tras una operación de casi 11 horas, se le salvó la pierna, y en menos de un mes Miguel empezó a andar, y a bailar, sin muletas.
Desgraciadamente las dudas de si había metástasis o no se confirmaron negativamente apareciendo varios tumores, en distintas partes del cuerpo.
Los oncólogos del Hospital Niño Jesús después de verano entendieron que no había más alternativas y sus padres decidieron llevar a Miguel al Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona donde le han tratado hasta hace apenas un mes.
Miguel se sobrepuso a la adversidad, siempre con una sonrisa en la cara. Nos dio a todos una lección de madurez y entereza pese a su edad.
En todo este proceso continuó sus estudios, siguiendo siendo el mejor estudiante de su curso pese a las continuas faltas de asistencia a clase, pese a las largas, durísimas y continuas sesiones de quimio, y los continuos viajes de ida y vuelta a Barcelona.
Hace apenas un par de meses protagonizó la campaña #paralosvalientes impulsada por la Fundación Mesi para captar fondos para el Hospital de Oncología Pediátrica del Hospital Sant Joan de Déu donde estaba siendo tratado.
El lema del spot era “PARA LOS VALIENTES”
Estas palabras le define totalmente. Miguel ha sido un valiente, que nos ha encogido el corazón y al que nunca olvidaremos.
Desde estas líneas queremos dar un gran abrazo a sus padres Miguel y Paz, que han demostrado un enorme amor, entereza, generosidad y decisión en este terrible proceso.
El sarcoma nos ha vencido de nuevo. Los que hemos vivido este proceso en carne propia conocemos la impotencia, injusticia y brutalidad de esta enfermedad. Es todavía una lucha demasiado desigual.
Vamos a seguir el ejemplo que nos dieron Miguel y sus padres. El coraje y lucha que nos trasladan día a día las personas que padecen esta enfermedad es lo que mueve a la Fundación a seguir su ejemplo y continuar en la lucha, aportando nuestro grano de arena para vencer la enfermedad.
A Miguel la vamos a recordar desde la Fundación Mari Paz Jiménez Casado como él se merece, como un VALIENTE.
